BUSCAD PRIMERO EL REINO DE DIOS

Algunas personas piensan constantemente en su propio adelanto espiritual. Por lo menos en mejor pensar en el progreso espiritual que en desear riquezas materiales, sin embargo, aún eso es egoísmo, aunque en más refinada forma. Mi propia experiencia me induciría a decir que la mejor manera de comenzar es olvidar todo cuanto concierne al progreso de uno y simplemente dedicarse al trabajo del Maestro. Si uno hace eso, el resto ha de venir. Es la antigua verdad expuesta en el Evangelio: "Buscad primeramente el reino de Dios y Su justicia y lo demás se os dará por añadidura" (Mateo 6:33). Eso es completamente verdadero; lo demás viene. Cuando no buscamos el progreso, de repente encontramos que en realidad hemos avanzado algo y eso también es importante.

Cuando el ser humano ve por primera vez lo que es realmente la vida en el Cuerpo Causal, también se da cuenta de lo útil que él podría ser en ese nivel, del número de linea de trabajo que hay, a través de las cuales su actividad podría hallar expresión, y tal vez podría preguntarse: "¿No sería mejor que yo hiciera este nuevo y espléndido trabajo que se abre ante mis ojos?". Yo mismo he adoptado la costumbre de buscar el consejo o el deseo del Maestro siempre que se han presentado lo que parecían grandes oportunidades, y sin embargo existía la posibilidad de que aún habría sido mejor renunciarlas. Al decir yo: "Maestro, ¿qué deseas que haga?", a menudo su respuesta era: "Es asunto que tú debes decidir". Entonces, uno puede tan solo ejercitar su propio criterio. No es posible sentar reglas en tales casos. Con todo, yo estaría dispuesto a experimentar lo superior; pero debemos recordar que una y otra vez se nos advierte: "No permitáis que el deseo de conseguir vuestro propio desarrollo obstaculice ningún trabajo útil que podáis hacer. Vuestro desarrollo vendrá a su debido tiempo". Siempre he seguido ese plan y creo que es la actitud más segura.

Por medio del trabajo hecho en ese espíritu de olvido de sí mismo adquirimos el poder que nos hará aparecer como nada ante los ojos de los seres humanos. Si fuera necesario, recibamos con agrado la humillación, porque ella ayuda a alejar la personalidad, y eso es lo que más se necesita. C.W.L

Fragmentos extraídos del libro "PLÁTICAS SOBRE EL SENDERO DEL OCULTISMO " (Vol III Luz en el Sendero) de A. Besant y C. W. Leadbeater publicado por Editorial Metafísica (Señora Porteña)