GRAN INVOCACIÓN

La “Gran Invocación” es una de las más antiguas plegarias conocidas, y solo los Seres más excelsos podían utilizarla. La “Gran Invocación” fue empleada por la Jerarquía desde el año 1425 d. C., aunque data de miles de años antes de esa fecha. La agonía humana dejada por las secuelas de la primera y la segunda guerra mundial, la angustia de las mentes y los corazones de todo el género humano, condujo a que, en 1945, el Señor Maitreya –en aquel entonces “Cristo de la Tierra” y ahora Buddha de la Tierra- tomara la gran decisión de darla a conocer a la humanidad para que sea recitada por todo el mundo.

 

El Señor Maitreya, conocido como “Lord Divino”, es actualmente el “Buddha de la Tierra” y miembro del “Triunvirato de Shamballa”, compuesto por Él, el Señor Gautama y Sanat Kumara. Trabajó a través de Krishna, en la India, que fue el “Primer Cristo Despierto” en la historia de la humanidad, y es el mismo Ser que actuó a través del Maestro Jesús El Cristo en su ministerio. Fue el anterior Cristo o Boddhisattwa de la Tierra. Su nombre quiere decir “Compasión Infinita”. Es la encarnación de Dhyãni Buddha Amoghasiddhi.

 

La “Gran Invocación” consta de tres partes que, para su estudio, pueden ser divididas en, aproximadamente, treinta y tres fragmentos.

 

El propio Señor Maitreya recitó por primera vez la “Gran Invocación” en la Luna Llena del mes de junio de 1945, celebración conocida como la “Luna Llena del Cristo”, así como la de mayo es conocida como la “Luna Llena del Buddha”. No fue fácil traducir las frases tan antiguas que la componen, pues no tienen fecha ni antecedente alguno en los idiomas modernos, pero se hizo y ahora es una plegaria mundial. Actualmente no pasa un solo día sin que el mismo Señor Maitreya pronuncie la “Gran Invocación”, y los que la conocen pueden unirse a Él en su pronunciación.

 

 

Extraído del Libro “D. K. MASTER”, de Rubén Cedeño.

Editorial Metafísica.