La Novena Iniciación es la Negación. Es la liberación de todas las formas posibles de tentación, particularmente en lo referente a los Planos superiores. En la Novena Iniciación de la Negación, la revelación presentada al Maestro concierne a la naturaleza del Ser y de la existencia. El Ser está relacionado con ESE que crea, con el punto universal de la Vida planetaria o solar responsable –y lo ha sido siempre- de la vida de todas las formas, desde la manifestación más grande hasta la más pequeña. Cuando se concede esa revelación al iniciado, hace contacto inicial, por primera vez, con el “Gran Sol Espiritual Central”.
Cuando se comprende que nuestro propósito planetario está misteriosamente relacionado con la revelación del Amor en nuestro pequeño planeta Tierra, mediante el proceso de la creación, surge el concepto de que existe la probabilidad de que nuestro planeta tenga una excepcional relación con el Corazón del Sol. El corazón del iniciado arde de amor, está tentado a retirar Su decisión y a permanecer en el planeta con esos Salvadores del Mundo que han elegido el Sendero del Servicio en la Tierra.
En la Novena Iniciación de la Negación, esa elevada percepción espiritual está descrita por la palabra “existencia”, pues existencia es vivencia más percepción, que “descubre el lugar que le corresponde y el hogar espiritual de su Ser, el verdadero Hogar de todos los Seres; pero sobre todo, nada saben nuestras formas planetarias”. El iniciado finalmente llega a descubrirlo, después de luchar con el mal dentro de sí mismo, con el materialismo y con el mal en la familia humana, y luego de luchar para ayudar a “cerrar la puerta donde se halla el mal” y de negarse a hacer cualquier contacto (aún con buena intensión) con el mal cósmico. La Logia planetaria de Maestros Lo ha absorbido y, durante la Iniciación final, es reconocido por la Gran Logia del Señor Sirio; ya no tendrá nada que ver con la Logia Negra de Adeptos. Mitigará sus malos efectos y luchará por anular sus resultados.
Extraído del Libro “D. K. MASTER”, de Rubén Cedeño.
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