SONRISA ANGELICAL
Al purgar las capas tóxicas de negatividad que se han acumulado y anquilosado en el inconsciente, se puede ir recuperando algo inmensamente valioso que es la sonrisa, no la que produce un chiste pasajero, sino la del "Ángel de la Sonrisa" de la Catedral de Reims. ¿Cuál eso esa sonrisa? Es la más maravillosa de todas las sonrisas, la que le dibujan a las estatuas de los ángeles y buddhas, a las imágenes de muchas vírgenes y santos. Esa es la sonrisa del "Ángel de la Sonrisa" de la Catedral de Reims, que se está riendo por nada. Es divina porque viene del interior, tiene un origen intrínseco. Se puede estar escribiendo, tocando un instrumento musical, caminando por la calle, en una obra de teatro, mientras los labios dibujan una sonrisa de complacencia, de felicidad interna, de satisfacción pura, por el solo placer de vivir, de ser, de existir, de hacer. Es la sonrisa de vivir complacidos por nada, por el solo hecho de ser y vivir.
Para tener la expresión del "Ángel de la Sonrisa" de la Catedral de Reims, es propio llevar una vida afectiva, dulce, pacífica, interactiva, relacionada, con amigos, compañeros, parientes, vecinos, y con todos, de mucho gusto. La expresión del "Ángel de la Sonrisa" de la Catedral de Reims surge cuando no hay engaños, evasiones, autoridades, la podredumbre oculta de la hipocresía, de ser tóxico o "metafísico", por estar matándose a sí mismo; surge realmente cuando ese tiene la sanidad mental que produce el "Silencio Interior".
Fragmentos extraídos del libro PLACER DE LA VIDA de Rubén Cedeño publicado por Editorial Metafísica.
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